La exhibición del patrimonio natural, humano y artístico se conserva en los museos y visitarlos es una experiencia única que nos llenará de conocimiento y reflexión.
Sin embargo, en común recibir comentarios en nuestras redes sociales sobre lo tedioso que puede resultar ir a un museo sino asisten con la mente abierta y sobre todo un plan para pasarlo increíble.
Si es su caso o simplemente quieren sacarle mayor provecho a sus visitas, les compartimos algunos tips para recorrer un museo.
Investigación y organización
¿Se imaginan ir al MoMa de Nueva York y no ver la Noche Estrellada de Van Gogh porque no sabían que estaba ahí? Contemplar un cuadro famoso en vivo es una experiencia indescriptible, porque pase lo que pase nunca será como lo imaginamos.
Será más pequeño o tal vez más hermoso, pero no los dejará indiferentes. Por eso, al plantearse visitar un museo, hagan una pequeña investigación sobre sus indispensables y las exposiciones permanentes y temporales vigentes.
Asimismo, pregúntense: ¿qué quiero ver? Si en el Museo de Historia Natural desean pasar más tiempo en la sala de dinosaurios, se vale elegir lo que más llama su atención.
Tras su investigación, pueden hacer un pequeño itinerario con las obras u objetos que desean ver y con base en eso, realizar su propio recorrido y hacer de su visita una gran experiencia.
En este artículo les compartimos 5 formas de visitar un museo, que pueden ser el recorrido de Highlights, tour guiádo, tour del magnetismo, el iPod tour y por tema.
Reserva
A nadie le gustan las filas y en un viaje, mucho menos. Es tiempo perdido y puede resultar desesperante. La mayoría de los museos tienen la opción de reservar con antelación, si es posible, realícenlo.
Además de ahorrar tiempo valioso, muchas veces sale más económico y sobre todo sabrán de antemano si hay algún evento especial, sala cerrada o un horario diferente el día que piensan visitarlo.
Usen ropa cómoda
Caminarán mucho y en ocasiones pasarán largos ratos sin sentarse. La ropa y el calzado cómodo será su mejor aliado para darle un descanso a su cuerpo.
Para conservar algunas obras y objetos, muchos museos cuentan con una temperatura baja que puede llegar a ocasionar frío. Lleven una pequeña chamarra o suéter en caso de requerirlo.
Tomen descansos
Muchas veces nuestras ganas de conocer todo nos llevan a ir corriendo y no disfrutar lo que vemos. Es importante recorrer las salas sin sacrificar nuestra comodidad y no exigirnos de más.
Tomen descansos de vez en cuando, no hace falta salirse. Una visita a la cafetería o sentarse en aquella banca frente a un cuadro podría ser la parada que necesitan para recuperar fuerza.
Interactúen y diviértanse
Los museos ponen mucho esfuerzo en llegar a las personas. Con folletos, mapas, audioguías y hasta instalaciones y materiales interactivos buscan crear una experiencia completa para los visitantes, ¡aprovechen todo lo que esté a la mano!
TipFinal: Olvídense de la cámara
Querer poseer la foto ideal de nuestra obra o sala favorita podría mermar su experiencia al tratar de ganar el mejor ángulo a las decenas de personas que desean lo mismo al mismo tiempo. De hecho, hay museos que prohiben las fotografías (investiguen si es su caso) y a veces dejar la cámara de lado nos permite potenciar nuestros sentidos.
