Uno de los mayores misterios del crimen en serie a nivel mundial sucedió en Londres. Corría el año 1888 cuando sucedieron al menos cinco homicidios en el barrio londinense de Whitechapel (East End) con las mismas características.
Las víctimas eran mujeres que se dedicaban a la prostitución en medio de una fuerte crisis económica. De acuerdo con cálculos de la época, en Londres había alrededor de 62 burdeles y 1,200 prostitutas en Whitechapel.
A pesar de que la Policía Metropolitana de Londres identificó once homicidios ocurridos en Whitechapel entre abril de 1888 y febrero de 1891, sólo cinco cumplían con todas las características del mismo asesino: cortes en la garganta, mutilaciones, extirpación de órganos y desfiguración del rostro.
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Pese a que se investigó aproximadamente a trescientos sospechosos, no se pudo esclarecer la identidad del asesino, siendo un escándalo y causando polémica entre la prensa de la época.
Pero, ¿por qué sino se dio con el sospechoso, se le conoce como Jack el Destripador? Este apodo fue utilizado luego de que la policía recibiera tres cartas supuestamente firmadas por el asesino y en la última se usara este alías. A partir de entonces, el asesino comenzó a ser referido por este nombre.
Su figura ha sido usada en libros, películas, series y hasta atracciones turísticas, porque ¡sí! existe un Museo y varios tours de Jack el Destripador en el este de Londres, atracciones para los amantes del turismo negro.
