Por: Cynthia Gómez González
La primera vez que me subí a un avión para salir de mi país, sin duda ha sido una de las mejores experiencias de mi vida, tenía idea de lo que me esperaba pero me quedé corta.
Después de eso, no pude parar; en el 2006 inició mi adicción, trabajo para viajar.
Mis metas son conocer nuevos lugares, vivir experiencias únicas, ser parte de la historia del mundo.
Me gusta leer y documentarme.
Recuerdo que leí un libro de Elizabeth Kostova, La Historiadora. Me encantó no sólo por el género si no por los lugares en que se desarrolla, gracias a ese libro me marqué la meta de ir a Hungría, Rumanía, Turquía y por qué no, se me ocurrió empatar la tradición de Halloween y estar un 31 Octubre en Transilvania.
Leer me ha ayudado a conocer y estudiar al mundo, cuando decidí ir a Marruecos tenía que hacerlo a través del Estrecho de Gibraltar, tenía que cruzar una de las vías de navegación más importantes del mundo.
O ir a Panamá para ver cómo funciona el Canal, considerado como una de las grandes obras de la ingeniería mundial del siglo XX.
O hacer cosas tan ordinarias como tomar una copa de vino, pero dando un paseo por el Támesis o comer un sándwich bajó la sombra de la Torre Eiffel. Hacer amigos y repetir las mismas conversaciones.
Ir a Vietnam porque James Bond me enseñó una locación que parecía un cuento de hadas. Leer la biografía de Picasso y después sentarme horas para admirar el Guernica.
Hacer cosas como poder estar en medio de dos continentes, Europa y Asia o ir a la mitad del mundo para tener un pie en el hemisferio norte y otro en el sur o caminar horas bajo un sol intenso para buscar un Piquero Patiazul, uno de los animales meticulosamente estudiados por Charles Darwin en sus trabajos sobre la evolución de las especies.
He conocido lugares icónicos que se ven en películas y libros. Mis pies han pisado la historia. Me falta tanto por ver, por hacer, por conocer y espero aprovechar cada oportunidad.
Soy afortunada por tener está adicción, pienso que cuando me muera, de alguna manera me iré muy feliz porque me llevaré lo que más he disfrutado, viajar.