¿Quién dice que la muerte debe ser triste y gris? Si bien hay festividades relacionadas con la muerte que celebran la vida, como el Día de Muertos en México, este cementerio en Rumania es uno de los más alegres del planeta.
En el condado de Maramureş, a 8 kilómetros de la frontera con Ucrania, se encuentra la aldea de Săpânța, la cual se ha vuelto popular por sus tumbas con coloridas pinturas y epitafios que describen, de una manera original y poética, a las personas que están enterradas allí.
En las lápidas también se describen escenas de la vida de los fallecidos, algún episodio humorístico, la noticia de cómo falleció o alguna enseñanza.
Los orígenes del cementerio se remontan a 1935, cuando el artista local Stan Ioan Patras comenzó a esculpir las lápidas con un estilo entre la viñeta satírica y las imágenes de las vidas de santos.
Esta práctica local, se aleja de las tradiciones europeas más arraigadas que perciben a la muerte con solemnidad y tristeza.
El llamado “cementerio alegre” se ha convertido en un museo al aire libre y en una atracción turística, ¿ustedes lo visitarían?
