Por: Nanni Gabrielle (Colaboradora invitada)
Cuando uno piensa en París lo primero que se imagina es la Torre Eiffel, el amor en pareja, las crepas y los cafés parisinos… París es una ciudad que me causa un “je ne sais quoi”. Es simplemente mágica. Una ciudad donde cada emoción se triplica. Es todo un sueño.
Era una fría mañana de otoño, se notaba el frío en los rostros pálidos de las personas, pero el frío no era excusa para no disfrutar de los paisajes urbanos que una ciudad como París brinda. Me dirigía a ver a un amigo para comenzar un día de caminata para explorar el arte callejero. Primera parada, la calle Oberkampf (rue Oberkampf), pero antes decidimos detenernos por un café. Ya se sentía la vibra juvenil, se veía el arte en las paredes. En la rue Oberkampf ubicada en el distrito 11 de París fue donde encontramos nuestro primer mural.
Tuvimos suerte y pudimos ver al Artista Karl Addison en acción pintando en Le Mur, un espacio dedicado a los artistas, que cada dos semanas cambia la obra exhibida para darle así la oportunidad a los nuevos artistas de exponer sus obras.
Le Mur, 107, Rue Oberkampf, Paris.
París tiene la fortuna de ser una ciudad multicultural, lo cual, la hace más interesante y a la vez polémica. Al ver el Street Art parisino encontramos que es con este tipo de expresión artística, con la que el artista puede intervenir y mezclar el arte con la ciudad misma, dando como resultado distintas formas de expresión y estilos únicos, como pueden ver.
Otro mural que deben ver es el que se encuentra en esta misma calle pero con esquina en la Avenue Jean Aicard y es el creado por el artista Retro Graffitism. Como pueden ver, el impacto de los murales en París se ve reflejado en el contraste e interacción de los edificios antiguos con las obras, lo cual las hace ser muy divertidas y llamativas.
Las múltiples expresiones del arte callejero que se encuentran a lo largo de la ciudad, confirman a la perfección que París es un museo sin paredes o puertas, y a donde quiera que se vaya, se puede encontrar algo nuevo para ver.
Encaminados, decidimos tomar rumbo hacia el Boulevard de Belleville, donde nos pareció que cada ilustración que veíamos nos estaba guiando, como si estuvieran perfectamente acomodadas para que fueran seguidas.
Nos adentramos a la zona más conocida de París por su arte callejero: Belleville.
Llegamos a Rue Denoyez, una de las calles más conocidas de París por su Street Art y porque, anteriormente sus casas eran usadas como squats, lugares abandonados donde los artistas jóvenes vivían y eran utilizados como lugares de trabajo. En la actualidad nadie vive allí, aunque estos espacios siguen existiendo en otras partes de la ciudad.
Teníamos ya suficiente del distrito 11, así que fue momento de dirigirnos al metro para ir a uno de mis barrios favoritos: Montmartre, en el distrito 18.
Nuestra primera parada la estación del metro Abesses, donde comenzamos a subir por las calles y donde se pueden encontrar principalmente stencils, que son obras creadas con plantillas.
Rue des Trois Fréres
Rue Androuet
Rue Berthe
Rue Gabrielle y Rue Drevet
París brinda infinidades de cosas por hacer, así que si estás planeando un viaje a París y quieres descubrir la ciudad de manera distinta, la mejor opción es caminar y mirar por todas partes para no perderte de nada, porque a veces tenemos solo una idea de lo que es París, pero si hacemos este tipo de actividades, podemos sorprendernos con todas las increíbles opciones que se encuentran por ahí, simplemente esperándonos, porque no necesitamos forzosamente ir a un museo para ver arte, ya que en la calle podemos estar mucho más cerca de los artistas y ver en tiempo real la construcción misma de las obras y lo mejor de todo, de forma gratuita.
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