Al hablar de Japón nos viene a la cabeza un país rico en cultura, tradiciones, moda y sobre todo experiencias.
Hace algunos años tuve la oportunidad de visitar esta increíble ciudad y aún lo recuerdo como si fuera ayer.
Tenía pocos días para recorrer la capital de Japón, pero recuerdo que le conté a Alan que iba a ir y me dijo “Tienes que ir a Harajuku”. No tenía idea de lo que hablaba hasta que me encontré ahí.
Harajuku (原宿) se refiere a la zona que se encuentra situada cerca de la estación de Harajuku de Tokio, entre la línea Shinjuku y Shibuya. Es el barrio de la moda de la ciudad, también conocido como el centro de las culturas adolescentes en donde se reúnen las personalidades más extravagantes de Japón.
El punto focal de este sitio es la calle peatonal Takeshita (竹下通り) donde pase la mayor parte de mi tiempo. En un estrecho espacio de más o menos 400 metros de largo verás tiendas, boutiques, cafeterías y restaurantes de comida rápida dirigidos a los jóvenes de Tokio.
Lo primero que llama la atención al comenzar a caminar por ella es la elaborada puerta de entrada, con un diseño retro-futurista, globos y el nombre de la misma escrito en caracteres romanos.
En esta calle puedes hacer grandes compras y encontrar tiendas interesantes entre las que se encuentran: Daiso, que forma parte de una cadena de tiendas en las que puedes encontrar gran variedad de productos por sólo 100 yenes. Otro establecimiento popular es Tutuanna, una marca de lencería, ropa interior y otros complementos muy popular en Japón.
Pero sin duda lo mejor es la gran cantidad de boutiques de marcas independientes de ropa, muchas de ellas especializadas en tendencias de moda poco comunes.
Caminar por ahí fue toda una aventura, en si todo el barrio vale la pena. Harajuku es un lugar bastante divertido, que si vas a Tokio no te puedes perder. Pero a mi lo que realmente me interesaba era conocer la cuna de muchas de las tendencias de Japón y justo en Takeshita las encontré. El ambiente, personalmente, me encantó y sin duda alguna te lo recomiendo.