En un destino que ofrece cada día más opciones y posibilidades pareciera un tarea imposible decidir en donde hospedarse cuando se visita la Riviera Maya. Mis vacaciones familiares para recibir el 2013 las pasé en el hotel Paradisus Playa del Carmen y esta esta es mi experiencia.
El enorme hotel (me sorprendió su tamaño tratándose de Playa del Carmen) está dividido en dos partes “La Esmeralda” y “La Perla”. La primera es la sección familiar y la segunda es sólo para adultos. Ambas son bajo el plan “all inclusive” y son prácticamente un espejo con algunas diferencias marcadas.
LO BUENO
La comida está deliciosa tratándose de un “todo incluido” hay restaurantes que ofrecen desde comida americana hasta mediterránea pasando por japonesa y cocina de autor. El servicio es muy atento, amable y eficiente y más si hablamos de una época donde parecen haber turistas hasta en las coladeras.
Los espacios para los niños en la zona Esmeralda son ideales y divierten a los menores, una alberca con un barco pirata en el centro rodeado de un tiburón gigante y un hipopótamo son el sueño de cualquier infante. Pared de escalar, actividades recreativas y un kids club complementan el entretenimiento infantil.
No sé si por decisión del hotel o por restricción del gobierno el mangle cercano a la playa ha sido conservado. La playa es angosta pero suficiente y perfecta para tomar el sol.
Las habitaciones tienen dos tinas de hidromasaje, una en el baño y otra en la terraza. Las amenidades son más que adecuadas con café nesspreso y bebidas variadas. Un dock para el ipod que también es reproductor de dvd’s. Pantalla de plasma y una comodísima cama. Algunas tienen acceso directo a la alberca.
El Spa está delicioso. Las instalaciones están muy bien. El área común cuenta con dos jacuzzis y un alberca templada con enormes chorros de agua que ya son un masaje mismo. Las cabinas de masaje al aire libre están ubicadas en esta zona aunque tienen poca privacidad. Yo tomé un masaje deportivo en las cabinas privadas que aunque algo doloroso fue muy reconfortante.
LO MALO
La decoración es contemporánea y un poco exenta del toque playero. El interiorismo está muy logrado en la mayoría de los espacios aunque la calidad de los muebles y los adornos no son de la más alta (algunas piezas son hasta piratas) Es efectista, digamos “da el gatazo”.
La distribución de los espacios comunes es rara y un poco ilógica. Los grandes pasillos desembocan en entradas diminutas y con poca personalidad. La playa solo tiene un acceso por lo que es necesario caminar bastante para llegar a ella si te encuentras en un extremo del hotel.
Aunque el hotel se encuentra en Playa del Carmen no está cerca de la zona principal de la 5a avenida y habrá que tomar un taxi o caminar 30 minutos para llegar.
La relación calidad precio no me parece justa. Pienso que por el mismo precio puedes quedarte en un hotel de mayor calidad en el mismo destino.
ES BUENO PARA
Si vas en familia es un lugar ideal pues no es necesario salir del hotel para que todos los miembros tengan diversión y entretenimiento. También si vas en pareja la sección “sólo adultos” tiene de todo y no es necesario ni siquiera asomarte al lado familiar. Aunque yo personalmente eligiría otro hotel como el Live Aqua Cancun para el plan pareja, me gusta más y no es tan caro.
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