La Comisión Europea aprobó la propuesta de ley de Francia que prohíbe la eliminación de vuelos domésticos cortos que tengan una ruta alternativa en tren, de no más de dos horas y media, esto con el objetivo de reducir las emisiones de CO2.
Esta decisión solo afecta a tres rutas aéreas, desde París Orly a Lyon, a Burdeos y a Nantes, ya que tienen una alternativa en tren, de viajes directos, de dos horas y media.
En un principio, se proponía la eliminación de más rutas aéreas, sin embargo no se aplicó ya que no se cuentan con las suficientes frecuencias diarias.
La medida solo se aplicará por tres años y posteriormente se revaluará con los resultados obtenidos.
Ante la decisión tomada por la Comisión Europea, el ministro de Transporte de Francia, Clément Beaune, consideró que es un gran paso y expresó su orgullo de que Francia sea pionera.
Esta medida podría ser un precedente para que otros países como España, Suiza o Reino Unido se aplique.