Colaboraciones

Consejos para un viaje lento y con mascota

Por: Karla y Paco (Colaboración especial) 

Hace tiempo les conté sobre Slow Travel, una tendencia de viajes que está convenciendo a muchos de cambiar  su estilo de vida y de viaje o la vida de viaje.

Entra aquí para ver el artículo de slow travel

Hoy quiero contarles sobre sus ventajas y la importancia que tiene viajar lento en nuestras vidas y en nuestro planeta, y sobre todo brindarles algunos consejos para que puedan tener una experiencia agradable viajando lento y en compañía de su mascota.

Una de las cosas que más disfruto cuando viajo lento es adentrarme a la cultura del lugar con desplazamientos lentos. Creo que la forma en la que nos movemos de un lugar a otro, es la parte más importante del viaje, no solo por las distancias que solemos recorrer al momento de conocer un país, sino por el impacto que tiene en nuestro planeta, es por ello que viajando lento, tenemos más oportunidades de movernos a pie, en bicicleta o en tren. Para minimizar los trayectos en auto y avión.

De esa forma no solo conoces mejor la cultura del lugar, también conoces rincones hermosos y tienes más oportunidades de conectar con personas locales.

Los viajes lentos son ideales para disfrutarlos viajando con nuestra mascota, caminar es casi siempre la parte favorita de nuestros mejores amigos y es una actividad que puedes ir agregando al momento de viajar en cualquier lugar del mundo.

De esta forma también tienes más posibilidades para hospedarte en casas rurales, favoreciendo el comercio local.  Y algo que no puede ser más hermoso, es dejar la masificación y estar más cerca de apoyar proyectos comunitarios. Sin duda, es una forma más auténtica de conectar durante el viaje; de calidad y sostenible.

Además de lo enriquecedor que es contribuir siendo más consciente de tu forma de actuar y disminuyendo la huella ecológica que deja el turismo como lo conocemos. Y te permites disfrutar y aportar a una de las modalidades más increíbles de viajar: El Turismo Comunitario, que tanto me encanta.

Como lo vemos, son muchas las razones para intentar adoptar nuevas formas de viajar y sentir el mundo.

En general, dejar las prisas, aprovechar los silencios, abrazar lentamente los momentos y hacer pausas constantes, nos ayudan a mejorar nuestra calidad de vida y si esto lo agregamos a esos días de viaje, será sin duda una experiencia muy enriquecedora. ¿Cómo ves? ¿Lo intentamos?

¿Te gustaría adoptar esta nueva forma de viajar?

Acá te doy unos consejos que me han ayudado a viajar lento por algunos lugares del mundo.

  • Elige tu destino según tu momento de vida.

Cerca o lejos, por unos días o sin fecha de regreso, a un lugar conocido o un lugar fuera del mapa. Intenta que sea tu intuición la que te lleve a ese lugar.  Cualquier lugar es bueno para practicar Slow Travel. No solo en pequeñas aldeas en medio de la nada, también las grandes ciudades son buenas para intentar viajar lento y en compañía de tu mascota.

  • Olvídate de la ruta escrita

Dile adiós a los lugares imperdibles, explora de una forma en la que puedas disfrutar con tu mascota, siempre habrá un lugar cercano para que tu mascota también disfrute la experiencia. Explora esos lugares que dan vida.

Hazle caso a esa voz bajita y haz una experiencia realmente única de tu viaje. Recuerda buscar tu momento de vida en cualquier lugar del mundo. 

  • Déjate llevar por los consejos de la gente que vive en ese lugar

Las mejores historias y los mejores consejos, siempre te sorprenderán de los locales.

  • Activa todos tus sentidos

Presta mucha atención a todo lo que está cerca de ti, los colores, los sabores, los sonidos, explora cada parte de la realidad que te rodea justo en ese momento. Hazlo como si todo fuera por primera vez.

  • Sé un pequeño explorador

Colecciona todas las cosas que te asombran, dibuja, toma fotos, guarda paisajes, texturas, emociones,  guarda los pequeños tesoros de la vida.

  • Conviértelo todo en letras

Ayuda a tu mente a no olvidar los momentos que han sido tesoros. Registra en un diario todo lo que paso en esa vida de viaje.

En lo personal, siempre llevo conmigo un “travel book” para registrar todo lo que voy viviendo en mi viaje. La escritura siempre es un camino que me ayuda a estar presente y adentrarme en mis centros. Mirar adentro también es una parte que no puede faltar cuando estas de viaje, es en dónde suceden los mejores cambios dentro de uno mismo.

Te recomiendo llevar un diario de viajes para guardar los mejores momentos. 

Los viajes lentos no solo te permiten disfrutar de una forma más auténtica, sino te permite viajar con tu mascota y de esta manera te obligas a dejar  la lista de cosas por hacer y te permites ser un explorador junto con tu mejor amigo. Inténtalo y cambia ese chip de verlo todo de una. 

El mundo no se va y nuestra mascota no es eterna. Así que, no pierdas tiempo.

Estoy segura que tú y tu mascota, aprovecharán y disfrutarán aún más el viaje.

Te espero por aquí para seguir hablando de la vida de viaje y hacerla más especial con la compañía de nuestro mejor amigo. ¡No te pierdas!

Te seguiré compartiendo sobre nuevas modalidades de viajar que están cautivando al mundo.

Además de ayudarte a planear viajes con  tu mascota.

Y siempre recuerda ser un viajero responsable y respetar las reglas del lugar que visitas. Y como responsables de nuestras mascotas, tenemos que poner nuestro granito de arena para que nos sigan permitiendo el acceso a muchos sitios. 

Una mascota educada y un dueño responsable, son bienvenidos en todos lados.

Abrazos, siempre.

KARLA Y PACO.

Karla y Paco

Soy Karla, la mamá de Paco (un pequeño chihuahua). Nací y crecí en Aguascalientes, México. Comunicóloga de profesión.

Escribo diarios desde muy pequeña, me gusta ayudar a mi memoria a no olvidar, siempre he pensado que recordar es importante aunque vivir el momento es esencial.

Llevo 8 años viajando con mi perrito Paco.

Estudié en España y México y he trabajado en distintos lugares del mundo.

Me gusta la escritura y todos los días intento practicarla. Amo esa sensación de vivir la vida para contarla y leerla para volver a vivirla.

Ahora escribo mi primer libro de viajes con Paco y uno de mis deseos más grandes en la vida es no perder nunca esa sensación de ir hacia nuevos caminos, directo a lo desconocido, sentirme vulnerable y sentirme viva.