Cómo logré conocer las 7 maravillas del mundo

Por: Mario Arce

¡Hola!

Si estás leyendo esto, quiero compartirte la historia de mi más grande pasión: ¡Conocer el mundo!

Soy Mario Arce y estoy por cumplir 25 años. Nací y crecí en Lima, Perú, y estoy viviendo la aventura más grande mi vida. Hoy se cumple un año de haber conocido las 7 maravillas del mundo. ¿Cómo fue que lo hice?:

Estudié Administración y Negocios Internacionales y mi pasión por viajar nació cuando me encontraba de intercambio estudiantil en Sao Paulo, Brasil. Debo decirte que mudarme de mi país y vivir en una cultura muy peculiar fue el primer paso para darme cuenta que viajar nos puede otorgar una infinita variedad de experiencias.

Una madrugada cuando vivía en Brasil, mi amigo Ismael me envió unas fotos de otro amigo suyo que viajaba por el mundo. Me entró la curiosidad y revisando su cuenta en una red social, descubrí que él había estado en muchísimas ciudades. Al seguir viendo sus álbumes encontré la foto que más me asombró. Él había elaborado un collage con las 7 maravillas del mundo. Vi esa imagen y en se momento dije: Mario, tienes que hacer esto ¡ya! La idea me pareció A1, era una verdadera aventura. Tenía que darle la vuelta al mundo para lograr este objetivo y esa misma noche me quedé hasta el amanecer buscando pasajes, viendo rutas, leyendo blogs, todo para averiguar cómo podía cumplir con eso. Particularmente, soy un hombre perseverante que cuando tiene una idea en la cabeza, no para hasta conseguirlo. Uno de los factores más importante fue el dinero, era un estudiante y no manejaba un presupuesto, por lo que en un primer momento mi viaje por el mundo fue un plan a largo plazo. Me puse a ahorrar todo mi dinero y empecé a planificar la aventura. Como vivía en Brasil, la maravilla más cercana era la del Cristo Redentor en Río de Janeiro, el viaje me salió baratísimo y se convirtió en el inicio de todo.

Cuando regresé a Lima, me puse a pensar en las siguientes maravillas que me faltaban. Había que seguir ahorrando mucho y tener perseverancia. Pasaron los meses y ya estaba en el avión camino a Cancún, México, para luego irme a la segunda maravilla que conocería: el Chichen Itza.

La tercera maravilla que conocí fue Machu Picchu en Cusco, Perú. Aunque parezca raro, soy peruano y no había conocido tanto mi país hasta ese momento (Perú es hermoso). En menos de un año ya tenía acumuladas 3 maravillas.

Yo no podía creerlo, estaba avanzando con cumplir lo que me había propuesto. Como ustedes ya saben (y también lo han sentido) una vez que viajas, lo quieres hacer siempre, todo el tiempo. Lo que luego sucedió fue que las otras maravillas quedaban al otro lado del mundo. Además, el precio de los boletos de avión costaban mucho más. Esto no me limitó y seguí ahorrando. De pronto, ya estaba planificando mi viaje para Petra, Jordania, y el Taj Mahal, en la India. Hacer esto fue demasiado genial, quedé muy asombrado por el choque cultural y el estilo de vida de estos países.

Para inicios del año 2014, ya contaba con ¡¡5 maravillas del mundo!!. Creo que cuando te propones algo, tienes mucha paciencia y le pones todas las ganas posibles, la vida misma se encarga de brindarte las facilidades para lograrlo. Les digo esto, porque el viaje a la Gran Muralla China me salió casi gratis (por así decirlo). Yo trabajaba en relaciones internacionales y de un momento a otro salió la oportunidad de ir por unas semanas a trabajar a China. Sin dudarlo, agarre mis maletas y fui. De esta manera, la maravilla que había dejado para el final (por el costo elevado de pasaje) estaba frente a mí, increíble, ¿no?

Descubrí Alanxelmundo cuando ya tenía 6 maravillas acumuladas. Los videos de Alan logran transportarte por un momento a diferentes países. Es así, que utilicé todas las recomendaciones de Alan para realizar mi viaje a Italia y conocer la última maravilla que me faltaba: el Coliseo romano.

De esta manera, luego de 3 años en que nació esta idea; en marzo de 2016, logré completar las 7 maravillas del mundo. Llegar al Coliseo romano y decir: Mario, ¡lo lograste! me llenó de total satisfacción y puedo decirles que viajar es la mejor inversión de sus vidas.

Viajo porque la vida es corta y el mundo es enorme. Estos años conociendo Perú y el mundo, me han brindado la oportunidad de ver, con mis propios ojos, diferentes paisajes, conocer muchas culturas, salir de mi zona de confort y abrir mi mente ante la diversidad. Es una experiencia que te ayuda a crecer como persona y que de todas formas, te hace ver el mundo de manera diferente. Hoy, un año después de haber terminado con esta aventura, puedo decirles que el planeta me queda pequeño. Si por mí fuera, ya mismo estaría planeando mi viaje a la luna jajajaja. Pero aún me queda mucho por conocer.

Como diría Alan: ¡Viajeros! anímense a realizar la gran aventura de sus vidas, no tengan temor de explorar, conocer y de disfrutar lo que el mundo tiene para ofrecernos.