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Escandinavia y el Báltico: Destinos que no debes pasar por alto

Una de las cosas que siempre había soñado en mi vida era visitar Escandinavia. Creo que todos en algún momento hemos escuchado esas historias de que la mejor calidad de vida en el mundo se encuentra en esa región del mundo.

Por: Brenda Mejía

I. Malmo y Copenhague

Una de las cosas que siempre había soñado en mi vida era visitar Escandinavia. Creo que todos en algún momento hemos escuchado esas historias de que la mejor calidad de vida en el mundo se encuentra en esa región del mundo. Siempre quería corroborar esas historias de primera mano, y creo que logré entender porque Escandinavia es la región con la mejor calidad de vida en el mundo.

Llegué a Escandinavia via Copenhague, Dinamarca y con motivo de que el festival de Eurovision se celebraría en la ciudad de Malmo, Suecia. La ventaja de llegar a Copenhague, además de por ser un aeropuerto internacional, es que estás solo a 30 minutos de distancia de la ciudad de Malmo a través del Puente Oresund. La ciudad de Malmo es una de las más reconocidas en Suecia además de por ser la tercera ciudad del país, por ser la ciudad de la que proviene el famoso futbolista sueco Zlatan Ibrahimovic.

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El Puente Oresund es uno de los puentes más largos del mundo con una longitud total de 7.845 m, que corresponden aproximadamente a la mitad de la distancia entre las costas de Suecia y Dinamarca. El resto de la distancia se cubre mediante la isla artificial de Peberholm (islote de la “pimienta”) (4.055 m) y luego un túnel (3.510 m) en el lado danés. Las dos líneas de ferrocarril se encuentran bajo las pistas de la carretera. La experiencia de tomar el ferrocarril desde el aeropuerto de Copenhague hacia Malmo es una de las mejores. Del lado de Dinamarca vas con la expectativa de con qué te encontrarás cuando salgas del tunel. Una vez sales del tunel y comienzas a elevarte en el tren miras hacia los lados y ves el mar y las dos ciudades a lo lejos. Los dos países. Yo no pude contener la emoción y lloré al pensar eso en mi trayecto hacia Malmo.

Durante esos días había un pase especial por 5 días que costó USD$100 o aproximadamente 600 coronas danesas. Mi consejo es que en cualquier lugar de Escandinavia se compren pases para la transportación pública. Se debe tener en cuenta que al visitar Escandinavia el presupuesto tiene que estar bien pensado porque para quien venga de cualquier lugar en América, el costo de vida es caro. Preparen para organizar bien sus gastos y limitarlos lo más posible si quieren sobrevivir el recorrido.

Estuve entre el Sur de Suecia y la Capital de Copenhague por 5 días. La opción de hospedaje que utilicé fue airbnb.com en la cual tuve la suerte de conseguir una familia latina con quien estar. No le teman tampoco a esa posibilidad, van a disfrutar muchísimo y a aprender más desde el aspecto local del lugar al que están visitando. Fui al festival de Eurovision que en realidad es el gran atractivo de la ciudad de Malmo. Sin el festival, esta es una ciudad que en 3 días se puede recorrer completa entre sus museos, atracciones y paisajes. La realidad es que no tiene mucha vida nocturna, a menos que cruces el puente hasta Copenhague. Los días en los que estuve había muchísima vida gracias al festival.

Malmo es una ciudad buenísima para andar, ir de bus o ir de bicicleta. Su centro donde está localizado Stortorget (La Plaza Grande) tiene calles peatonales repletas de tiendas donde puedes encontrar tiendas suecas por excelencia como Åhlens y H&M.

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Turning Torso, una de las atracciones más visitadas en Malmo. Está localizada cerca de la playa y el malecón. Una de las áreas con más vida en toda la ciudad.

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Este es el Gustaf Adolfs Torg(Plaza) de Malmo. En todas las ciudades que visité en el país hay una como esta.

Intenté comer fuera lo menos posible pero algo que se debe intentar hacer tanto en Suecia, en Dinamarca como en Noruega es visitar el establecimiento de comida rápida de la zona Max. Su menú es muy variado y tienen distintas salsas para las patatas que deberían probar cuando estén en el área si son amantes de las hamburguesas.

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Max en Stortorget, Malmo.

Dejando atrás Malmo ahora hablaré de Copenhague. Copenhague es una ciudad mágica que desde el momento en el que sales de la estación central ya comienzas a respirarla. Lo primero que encuentras junto al salir de la estación es el parque de atracciones más antiguo del mundo, Tivoli.

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A pasos de ahí podrás encontrar la oficina de Turismo de la ciudad. Yo siempre recomiendo que al llegar a cualquier ciudad se visite la oficina de turismo para obtener información sobre los lugares que más te interesa visitar. Así sabrás si podrás caminar hasta el lugar que te interesa o necesitas tomar algún bus. Definitivamente, fui allá a preguntar por La Sirenita, y me enviaron por la mejor de las rutas.

La empleada de la oficina de turismo me envió a caminar hacia la Sirenita tomando Strøget, una de las calles peatonales comerciales más largas del mundo. En esta se puede encontrar muchísimas marcas y también muchas cosas curiosas que ver. Aquí les dejo algunas.

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En el camino en busca de la Sirenita, me topé con un lugar que no debe dejarse de visitar en la ciudad: Nyhavn. No es el mejor lugar para comer o beber, pero debe visitarse ya que aquí se encuentran los puertos donde puedes tomar el tour de los canales de Copenhague que es algo que si se debería hacer. ¿No hablas ni inglés ni sueco? Tranquilo, hay tours en español constantemente saliendo de los puertos. A las orillas de Nyhavn, los hinchas del Copenhague FC se reúnen antes del juego a beber su cerveza nacional Carlsberg. En este lugar también puedes encontrar una tienda con artículos de Hans Christian Anderssen, el autor de la historia de La Sirenita e incluso, también te lo puedes encontrar.

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Nyhavn

Al continuar el camino hacia La Sirenita, te encontrarás el Palacio Real donde reside la reina Margarita y el príncipe Federico, heredero al trono.

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Finalmente, encontré La Sirenita. No se debe visitar Copenhague sin tener esta emblemática foto.

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Otra cosa que disfrute mucho de Copenhague es la vida nocturna. Puedes encontrar una variedad enorme de cosas que hacer pero creo que no debes irte de la ciudad sin ir a un lugar de folk rock danés. Yo visité un lugar llamado Kind of Blue en donde vi distintas bandas mostrando su talento y quedé totalmente enamorada.

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Definitivamente en Copenhague hay muchas más cosas que hacer, pero deberías tomar mi ejemplo para pasar un buen día en Copenhague. Me hubiera gustado visitar también la fábrica de la cerveza Carlsberg. Creo que con 3 a 4 días en la ciudad puedes conocerla bien y hacer de todo lo que esta ofrece.

Hasta aquí mi reseña sobre Malmo y Copenhague. En la próxima entrega incluiré dos ciudades suecas que no se deben perder: La capital sueca, Estocolmo y la ciudad universitaria del país, Gotenburgo.

Alan Estrada