No tenía idea que “Lolita” llevara más de 40 años confinada a ese pequeño espacio, sóla, separada de su familia y por lo que parece, destinada a morir allí. De hecho no tenía ni idea que ese lugar existiera. Lo descubrí por casualidad en un libro que estaba en el hotel. La foto de una orca, un delfín y el logo: Miami Seaquarium.
Buscando qué hacer mientras estaba en la ciudad del sol, decidí visitar el Miami Seaquarium. Los acuarios me parecen lugares geniales para tomar fotos y ustedes saben que las Orcas son uno de mis animales favoritos. Jamás imaginé lo que me esperaba. El Miami Seaquarium es el acuario más viejo de los Estados Unidos y SE NOTA! Las instalaciones no pueden ser más deprimentes, decadentes y penosas. Hay poco que ver, o más bien hay poco que valga la pena ver.
Pagué por entrar $43 dólares y a los diez minutos estaba más arrepentido que Romeo de tomarse el veneno cuando ve que Julieta despierta. Me sentí fatal de ayudar a que ese lugar siga existiendo. Nunca he sido un activista empedernido en lo que a derechos de los animales se refiere pero debo decir que como nunca en la vida sentí tristeza, tristeza por los delfines, tristeza por los peces, tristeza por nosotros los humanos. Era difícil creer que este lugar existiera en un país primer mundista. Después descubrí que este acuario fue muy famoso en los sesentas pues aquí se grabaron y filmaron las películas y la serie de Flipper. Rick O’Barry entrenador del delfín que dio vida a Flipper y decenas de delfines en el Miami Seaquarium en aquella época es ahora uno de los mayores activistas para la liberación de delfines confinados al entretenimiento (documentado en el filme “The Cove” ) y también está involucrado en el activismo a favor de la estrella del Miami Seaquarium “Lolita”.
“Lolita” es la Orca en cautiverio más vieja que existe. Fue capturada en el año 70 en las costas del estado de Washington y desde entonces vive en un pequeño tanque en el Miami Seaquarium. Un tanque que según los expertos viola las leyes del Servicio de Inspección de Salud de Animales y Plantas –APHIS por sus siglas en inglés- en cuanto al tamaño mínimo permitido. Su caso me recuerda mucho al de Keiko, esa enorme Orca de Reino Aventura que saltó a la fama en la película “Free Willy” y que gracias a eso pudo juntarse el dinero necesario para trasladarla a un mejor hábitat y eventualmente liberarla en mar abierto.
Pero Lolita no ha hecho ninguna película, no es tan famosa y al parecer no muchos se preocupan por ella. Sin embargo hay personas que se han percatado de la situación de la ballena asesina y han intentado hacerlo del conocimiento público con documentales como “Lolita, esclava del entretenimiento” o la organizaciónwww.savelolita.org
El show de “Lolita” es un tanto deprimente. Aunque el público se emociona, aplaude y se sorprende cada vez que aperece tan hermoso animal no deja de sentirse un circo de modé. No lo disfruté en absoluto, comí en la cafetería del acuario cuya calidad de alimentos es aún peor que el de sus instalaciones. En menos de 3 horas ya estaba de regreso en mi hotel, escribiendo esto.
En algunas ocasiones les he hablado del turismo responsable y creo fielmente que esto es parte de eso. No tengo una posición definida frente al uso de animales para el entretenimiento, siento que es un tema que debe estudiarse a profundidad. Pero sí lo tengo claro en tanto al maltrato animal y las condiciones en que viven estos animales que creo está lejos de ser la ideal. Si nosotros como viajeros pagamos un boleto (como lo hice yo) ayudamos -aunque no sea nuestra intención- a fomentar que esto suceda. Los niños son los más felices en el Miami Seaquarium pero se lo atribuyo a su inocencia e ignorancia de la situación. Ellos sólo quieren ver a la gran Orca saltar. Somos los adultos los que debemos ser más conscientes del precio que realmente estamos pagando por entretenernos.
No sé cual será el futuro de Lolita y tengo la esperanza de que los esfuerzos de las organizaciones que luchan por su liberación logren su propósito. Es una tarea muy difícil, pero no imposible.
No sólo les recomiendo NO visitar este lugar, les pido por favor pasen este artículo a todas las personas que conozcan y si les nace hacer algo más pueden entrar a www.savelolita.org para obtener más información y conocer las formas de ayudar.
Seamos viajeros responsables.
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