¿Quién dijo que tenías que empeñarlo todo para darte una escapada romántica en Europa con tu pareja? El viejo continente tiene tantas opciones para disfrutarlo como años de historia, no es necesario llevar una fortuna si lo que quieres es tener momentos de película y construir memorias para recordar más adelante.
Usualmente relacionamos el romanticismo con atardeceres, miradores y comida, pues aquí van cinco combinaciones que pueden funcionar muy bien como receta de un escenario novelesco memorable.
- París – Unos vinitos al lado del Río Sena o frente a la Torre Eiffel
París es considerada una de las capitales mundiales de la gastronomía, pero de igual manera comer en uno de estos restaurantes con reconocimiento mundial es costoso, por eso el plan alternativo que proponemos es pasar por uno de los tantos supermercados que ofrecen una variedad amplísima de vinos, madurados y charcutería, porque allí, contrario a nuestros países latinos, el precio de estas delicatesen es bastante bajo. Te armas de un rico vino, un baguette, patés o mermeladas, un delicioso queso brie y emprendes camino a los jardines que rodean la Torre Eiffel. Un brindis y una deliciosa merienda con el atardecer de fondo será un plan inolvidable.
- Barcelona – Picnic en el Parc de la Ciutadella
Barcelona es el sueño de muchos al visitar el viejo continente, y aunque es una de las ciudades más costosas de España tiene por supuesto alternativas para el mochilero. Nuevamente nuestra primera parada será el supermercado para elegir una selección de frutas, quesos, panes y jamones, acompañados de alguna bebida refrescante para lograr la combinación perfecta en uno de los parques más icónicos de la ciudad: El Parc de la Ciutadella. Lleno de zonas verdes, esculturas, lagos y una fuente espectacular ideada por Josep Fontsére en 1872, digna de las mejores postales, es un pulmón en la ciudad. De lunes a viernes y sobre todo los fines de semana es muy probable encontrar grupos de música en vivo y bailarines de clases de swing y tap.
- Zadar – Ver el atardecer más lindo del mundo mientras escuchas los sonidos del órgano de agua
Considerado por Alfred Hitchcock como el atardecer más hermoso del mundo, la ciudad Zadar tiene aún mucho más para ofrecer. De las ciudades turísticas en Croacia, Zadar es una de las más económicas para el viajero. Caminen por el centro histórico hacia el órgano de agua y siéntense a contemplar el atardecer mientras escuchan la melodía de la obra de Nikola Bašić, artista croata quien se ingenió el órgano para convertir en música el oleaje del mar. Disfruten de un agradable momento en buena compañía. SI quieren comer algo rico y muy barato la panadería en Croacia es de muy buena calidad y muy sabrosa. Les sugerimos que prueben el burek y el atrukli, los dos son variedades de hojaldrados rellenos con queso, vegetales o carnes, los hay dulces y salados.
- Budapest – Contemplar la ciudad y el Río Danubio desde el Bastión de los Pescadores
El Bastión de los Pescadores es uno de los lugares más lindos para visitar en Budapest. El Halászbástya, como también es conocido, es una estancia con todo el estilo neogótico y neorrománico que caracteriza a la ciudad. Diseñado y construido entre 1895 y 1902, sobre la colina del Castillo de Budapest, en el lado Buda de la ciudad. Ofrece además de su belleza una vista privilegiada de la ciudad, el edificio del Parlamento de Budapest y el Río Danubio. Esta locación servirá para compartir una agradable charla y pasar un momento agradable. ¿Maridaje? Arriba pueden tomarse un cafecito.
- Praga – Comer un Trdleník mientras disfrutas de un atardecer en el Puente de Carlos.
El Trdleník es de origen Húngaro, pero se ha convertido en un icono de la ciudad Checa. Un rollo de pan dulce con azúcar y canela relleno de crema o helado y salsas de dulce. Es delicioso y perfecto para acompañar una caminata por las callejuelas del centro histórico de Praga y terminar con un atardecer en el clásico Puente de Carlos, un lugar con una hermosa vista sobre el río y el punto perfecto para despedir el día disfrutando el atardecer.
Para pasar un momento agradable en compañía de alguien especial hace falta únicamente tener la disposición. Qué llevar y dónde estar solo es cuestión de imaginación.
“Dame la mano, vamos a darle la vuelta al mundo”
Calle13