Por: Jhonathan Gomez
Mi viaje comienza en la ciudad de Guatemala con destino a Santiago de Chile, con escala en Bogotá, en Santiago pasé una noche que me sirvió para ambientarme un poco con la moneda y forma de vida en Chile, al siguiente día tomé un vuelo interno, de apróximadamente una hora, con aerolíneas Latam con destino a Pucón, que pertenece a la provincia de Cautín en la Región de Araucanía en el sur de Chile.
Pude ver desde el avión un magnífico paisaje que auguraba un buen clima y las mejores vistas del bosque patagónico de Chile, debo confesar que Pucón era un destino que había salido de la nada porque mi destino final era San Martín de los Andes, pero qué mejor que conocer la Patagonia en dos diferentes países.
En Pucón me instalé en un acogedor y pequeño hostal enfrente del lago Villarrica, una vista inmejorable a un precio accesible, se llama Chili Kiwi, cuyos clientes son en su mayoría estadounidenses o europeos; cuando llegué, mi compañero de viaje y yo éramos los únicos latinos en el lugar.
Nosotros íbamos a lo que íbamos, así que nos dirigimos a la estación de buses y nos subimos a un bus que va directamente al Parque Nacional Huerquehue, que está a 4 horas aproximadamente, el mismo bus regresó a recogernos así que no hubo problema de buscar otro transporte, solo se tiene que regresar a la hora indicada por el chofer.
En la entrada nos preguntaron si era nuestra primera vez, ya que hay varios senderos con diferente nivel de dificultad, nosotros tomamos el sendero Los lagos, cuyo tiempo estimado de camino es de 3.5 horas de ida, es de dificultad media baja, ya que existen senderos hasta de 2 días o más.
Desde que iniciamos pudimos observar lagos y lagunas por todas partes, la naturaleza se hacía cada vez más abundante, caminamos en medio de un bosque patagónico con árboles nativos, helechos y el bello silencio de la naturaleza: Mientras más avanzábamos, el camino se hacía más y más difícil, ya que estábamos en la transición de la época de invierno a primavera y aún había rastros de nieve por el lugar, la tierra estaba bastante lodosa, pero no importaba ya que nos esperaban las mejores vistas en los miradores siguientes, en el camino encontramos lagos como el lago chico, verde, toro y Huerquehue, cada uno parecido al otro pero tan diferente a la vez, los reflejos de sus aguas parecían espejos y hacían que los árboles se tornaran más altos aún, a la vez sus aguas frías tenían una calma infinita y transparencia verdosa, turquesa y azul; en fin ¡un manjar para la vista!
El tiempo había pasado sin darnos cuenta y había que regresar no sin antes pasar por otro sendero cercano, en donde había una cascada llamada Cascada del Águila, con aguas frías y con rastros de nieve.
El regreso fue bastante fácil en comparación con la subida, yo casualmente andaba lastimado de la columna pero eso no me impidió subir, de hecho, de regreso vimos que mucha gente bastante grande iba hacia arriba, eso sí se miraban en muy buena forma.
Esperamos en la entrada del parque unos 10 minutos y luego tomamos el bus de regreso a Pucón, es tan rico regresar en un bus bien equipado y sentirte cansado pero a la vez lleno de energía que te da la naturaleza, el aire, la vista, el tocar la tierra mojada, sentir el olor, es indescriptible.
Pienso que uno, en la mayoría de sus viajes anda en busca de ver ciudades cosmopolitas y grandes edificios o palacios, yo quiero ver y caminar en la montaña, sentir la tierra bajo mis pies, abrazar un árbol y extender mis brazos para absorber esa energía que cada vez está más en peligro de extinción, este invierno 2016 en varias partes de la Patagonia Chilena y Argentina duró menos de lo previsto, y la temporada de nieve comenzó tarde y acabó mucho más rápido que en todos los últimos años.
Con esta son 3 ciudades que conozco de la región y cada vez amo más la Patagonia y ¡quiero regresar!
Luego me fui a San Martín de los Andes, una ciudad de montaña en la Patagonia argentina pero esa es otra historia, los invito a que conozcan su continente, su naturaleza es incomparable y el sur recomendado 100%.
5
4.5