Por: Marisela Wyckoff
Hola viajeros, nosotros somos una familia viajera y está vez les vamos a contar de nuestra bonita experiencia en el parque de Nara en Japón, donde fuimos con nuestra primera hija para que pudiera interactuar y darles de comer a los ciervos.
Fue un experiencia que disfrutamos mi esposo, mi hija y yo; nos encantó poder convivir y darles de comer a los ciervos, un animal sagrado para los japoneses. Son animales que están impuestos a la gente, ellos se acercan a pedirte galletas, que ahí mismo las venden, pueden llegar hacer un tanto difícil algunos.
Uno tumbó a mi bebé y nos pegaba con la cabeza, pero de ahí en fuera la mayoría son bien portados.
Si vas a Japón, recomendamos 100 % una parada obligatoria por el parque de Nara y justo a unos minutos encontrarás el templo del Todaji, donde encontrarás uno de los budas más grandes de Japón.
Nosotros fuimos para la temporada de otoño y el paisaje fue muy bello.
Es un lugar ideal para todo tipo de viajero.