Por: Luz Angelica Martínez Martínez
Me encanta viajar y aunque no lo he hecho mucho, creo que conozco varios lugares. Todos los viajes los he disfrutado al máximo siguiendo muchos consejos de Alan por el mundo; como admirar cada lugar, su gente, su cultura, su gastronomía y los increíbles paisajes.
Mi aventura por Emiratos Árabes tiene la particularidad de que lo hice sola. La agencia me apoyo en los vuelos y el hotel, los tours yo los contraté por mi cuenta con una agencia del Cairo Memphis Tour (que cabe mencionar excelentes cumplieron con todo lo prometido).
La adrenalina a todo lo que da, al iniciar mi viaje, se retrasó el vuelo de CDMX por lo que hubo que ajustar el vuelo de la conexión en París. Al llegar a Dubái la incertidumbre de que llegaran por mi o tener que aventurarme a tomar el metro. El hotel que estaba en la zona Pakistaní, pequeño, nuevo, pero eso sí precioso de colores pastel, super limpio y una atención de primera. Mi inglés no es del todo bueno pero me defiendo, pero el árabe o el pakistaní pues con el traductor. El restaurante del hotel sirvió comida típica y exquisita lo cual fue una experiencia a mi paladar, la atención de 10.
Memphis Tour llegaba por mi a la hora establecida en camionetas cómodas de lujo y conocí con ellos: Burj Khalifa, Burj Al-Arab hotel, Palm Island y Palm Jumeirah, Dubái Mall, Marina Dubái, Dubái moderno, Dubái antiguo, crucero y Abu-Dabi. Los guías eran pakistaníes que hablaban español, solo en la cena en el desierto y la aventura en las dunas fue un árabe (quien no fue muy amable). Los pakistaníes me explicaron como ir a las fuentes danzarinas (en metro) y al marco que divide al Dubái viejo del moderno (en taxis).
También caminé en los alrededores del hotel, calles impecablemente limpias, sorprende que no hay basureros porque está prohibido tirar basura, tienes que llevarla contigo. La seguridad es impresionante, es un país muy seguro. Llama la atención que todos aman y respetan a sus gobernantes y reyes, están orgullosos de su país (claro si no lo hacen los sancionan). Es de destacar que hay personas de todos los países del mundo, ya que es una de las economías más fuertes; la riqueza se ve a cada paso, edificios, tecnología, autos, elegancia, etc.
En cada tour tuve la oportunidad de realizarlo con diferentes personas de distintas nacionalidades: americanos, neozelandeses, ingleses, argentinas, colombianas, incluso mexicanos (tristemente los más sangrones). Lo cual fue gratificante compartir con cada uno de ellos y disfrutar su compañía.
La descripción de cada lugar no la comento, ya que Alan es el experto. Me encantó compartir mi experiencia y recalcar que no fue muy caro, ya que pude conocer Dubái sin ir a hoteles lujosos, lo cual fue un aliviane para mi presupuesto.
Mi lema “NADA MEJOR QUE ACUMULAR EXPERIENCIAS DE VIDA”
