Mucho antes de #LadyProfeco y los escándalos, Maximo Bistrot ya era un restaurante exitoso, reconocido y asediado. Amantes del buen comer y famosos reporteros gastronómicos ya habían rendido sus alabanzas ante este pequeño local en la colonia Roma y lo menos que le hacía falta era la fama que le dio tan amargo episodio.
Maximo Bistro no es un restaurante, se me antoja llamarlo una cocina de experiencia. Lo que aquí se obtiene se consigue con esfuerzos en restaurantes de fama internacional. Aquí es donde uno entiende el placer de la buena mesa y la gente que ama su trabajo y la cocina.
El menú cambia todos los días dependiendo de los productos frescos que se obtienen personalmente por el chef Eduardo García en los mercados locales cada mañana. La difícil tarea del comensal será decidir qué platillo comer. Aunque siempre se puede optar por un menú degustación.
No hay palabras que puedan describir la experiencia que representa este restaurante sin pretensiones más allá de darle un viaje a tus sentidos. No importa si celebran una ocasión especial o solamente tienen ganas de comer algo excepcional. Maximo Bistro es un opción que pocos, muy pocos restaurantes en la ciudad pueden equiparar.
Jajajajajajajajajajaja, que gusto que la fama de este lugar la tenga por su buen sazón y no por la fama adquirida mediante la publicidad de Lady Profeco, indicutiblemente será una visita obligada en mi próxima visita al DF. Gracias por el dato. Saludos
¿Qué tal los precios?. Estaré en el D.F. por una semana y me gustaría darle el gusto bueno pero quisiera ir preparado <>. Saludos