Autor: Johnny Torrealba
Hola amigos de Alan x el mundo.
Hace aproximadamente 5 meses llegué de mi primer viaje de aventura y emociones. Me animé a escribir este post porque Alan y sus videos me animaron a realizar el viaje. Esa fuerte e insistente idea de conocer el mundo sus culturas diversas su gente siempre me ha llamado la atención y bueno llegó el momento y el destino fue Madrid.
Les cuento que al igual que todos siempre conocer otro país es una experiencia que a cualquiera le da algo de miedo por esto comencé a buscar información por internet tanto que cuando aterricé en Barajas ya conocía muchas cosas. Por haber revisado cientos de videos mi plan no contaba con guías turísticos, autos y hoteles de lujo simplemente era pasarla lo mejor posible sin gastar tanto y conociendo todo lo posible a pesar de que la gente asegura que en Europa hay que tener una maleta de euros para sobrevivir.
Pude disfrutar sin ninguna limitación por dos meses y aun me quedó dinero para comprar regalos y llevar a mis seres queridos. Hago énfasis en esto porque hay mucha gente que cuando decides hacer un viaje te empiezan a meter cuentos en la cabeza empezando desde “en el aeropuerto de Barajas no pasarás al menos que te revisen hasta la ropa interior y que a la final quedarás como mendigo pidiendo en Plaza Mayor por falta de presupuesto” pero aquí estoy yo para decirte que si se puede, sólo hace falta creértelo, trabajar para lograrlo y vivirlo.
Empezaré por contarles que no tenía reservación de hotel, sólo contaba con medio día después de la llegada de mi vuelo para lograr encontrar una habitación para alojarme junto con dos amigos. Mientras tomábamos un café para apaciguar algo el frio madrileño de invierno encontramos sin tanto esfuerzo una habitación con el encargado del local pues nos escuchó hablando y se metió en nuestra conversación. Nos ofreció una habitación bastante buena pues pagamos 25 euros la noche con derecho a cocina y todos los servicios pagos incluyendo calefacción. Otra ventaja era que el metro estaba a una cuadra de distancia.
Habíamos hecho una reserva, que es un requisito obligatorio en Barajas, en Pinto, un pueblo “cercano” a la capital. Lamentablemente nunca lo conocí por que cuando llegamos unos amigos nos comentaron que eso era demasiado retirado y que teníamos que viajar todos los días para poder llegar a Madrid. Realmente estaba más lejos de lo que pensaba y aquí me di cuenta que no es muy recomendable dejarse llevar por esas ofertas que te dicen una cosas y terminan siendo un fraude. Al final lo cancelé y nos quedamos en pleno Madrid.
La comida fue bastante accesible, claro que eso depende de tu presupuesto, pero como mi idea era ahorrar lo más posible compraba en supermercados donde encuentras de todo y a un mejor precio y cocinábamos en casa, la mejor opción para ahorrar. Por poner un ejemplo una Coca Cola de 2 litros costaba 2 euros y en un sitio turístico en el centro de Madrid o en un sitio de prestigio una lata costaba lo mismo. Pongo este ejemplo insignificante para que lo tomes en cuenta para mí fue muy importante pues me hizo poder actuar con madurez y poder así lograr mi objetivo.
Si viajas con bajo presupuesto o no has viajado por miedo a que no te alcanzara por que lo leíste en una revista o lo viste en un video, quítate ese miedo. Cada persona es una experiencia distinta y nunca vivirás de verdad si no te atreves y lo haces tú mismo.
Hay varias frases de Alan que me gustan y que me han hecho despertar esa fiebre de viajar a conocer el mundo que todos tenemos dentro una de ellas es “viajar te cambia la vida”. Definitivamente viajar me ha cambiado la vida de miles de formas. Hace un año no tenía ni la menor idea de que llegaría tan lejos y hoy sólo espero que llegue el próximo viaje para contar mis experiencias vividas.
Definitivamente viajar es como una droga, en el buen sentido de la palabra, que de la primera vez que lo haces nunca puedes parar. Aun tengo en mi boca el buen sabor de las tapas madrileñas y el arte de sus calles llenas de modernidad y melancolía, espero con ansias que llegue el próximo año para viajar de nuevo y vivir quien sabe cuántas nuevas experiencias.
Definitivamente viajar y conocer el mundo es una experiencia que no sólo te cambia la vida si no que te llena de libertad y ganas de no morir. El hombre lo que se propone puede lograrlo y estoy seguro que este es el comienzo de una larga historia que harán mi vida más interesante.