Autor: Julian Vh – @Juliaan_Vh
¡Hola Viajeros!
Hace aproximadamente dos meses te pregunté por Twitter si habías visitado Alemania, puesto que en mis viajes anteriores al extranjero me he basado en tus videos para saber qué lugares visitar. Esta vez, es diferente. Soy yo quien desea darte a ti y a todos los viajeros algunos consejos para cuando visiten esta hermosa ciudad: ¡Berlín!.
Fue mi primer viaje a Europa, por lo que como muchos viajeros más lo hacemos, mi primer opción de búsqueda sobre la ciudad fue “Alan x el Mundo”. Así como en tu canal, investigué sobre la ciudad en otros lados, vi algunos documentales para entender un poco más acerca de la historia de esta ciudad, y por último dejé que el destino me llevara a donde tuviera que estar.
Desde el principio me dejé envolver por su cultura, sumergiéndome en una experiencia totalmente nueva. Desde la salida del aeropuerto para tomar el transporte público (Basándome sólo en las aplicaciones que tenía en el celular) donde sin duda ha sido una de los sistemas de metro más complicados que me ha tocado usar, puesto que parece una telaraña por donde quiera que lo mires, pero una vez aventurándote, llegas a entenderle y moverte fácilmente. Eso sí, si no sabes tan si quiera una pizca de Inglés y mucho menos de Alemán, será muy complicado comunicarte, puesto que no todas las personas hablan Inglés y las que sí, lo medio “mastican”.
Tuvimos oportunidad de conocer lo más turístico, como siempre, la Puerta de Brandenburgo, el Monumento al Holocausto, el Muro de Berlín, La Columna de la Victoria, la Torre de TV, la Catedral, etc. Pero sin duda, lo que más me cautivó y robó el aliento fue la visita al campo de concentración de Sachenhausen, en Oranienburg. Aproximadamente una hora de camino en tren desde Berlín, está ubicado uno de los lugares más extraños que he visitado. Y esto lo digo quitando el hecho de que sea un campo de concentración nazi, porque en mi visita (Espero no te toque a ti o a los demás), no había absolutamente ¡NADIE! Al llegar sólo presionas un botón que abre la puerta, entras, se cierra la puerta, y estás sólo contra el gigantesco lugar.
Se pueden observar las famosas “barracas”, prendas y objetos de los presos, la torre de vigilancia, y lo más espeluznante, lo que alguna vez fue una cámara de gas… Está de más decir que el ambiente ahí es muy tenso, y no sé si por el hecho de estar parado donde hubo una masacre tan cruel contra personas, o porque estaba completamente solo el lugar, o una combinación de las dos.
Sin duda, Alan, es una visita obligada pues te hace reflexionar y aprender mucho sobre una etapa de la historia de la humanidad que estará para siempre en nuestras memorias (Al menos por la visita de museos pues no me tocó personalmente).
Además de esto es recomendable rentar una bicicleta y andar por toda la ciudad, pues además de segura, es bastante agradable conocer lugares que ni en sueños me imaginaría. Hay algunos bares locales muy buenos y económicos, y lo mejor de todo (Como buen mexicano) es que la cerveza la puedes tomar en la vía pública LEGALMENTE! Jajaja… Y si quieres probar algo delicioso pero con poco presupuesto, los famosos Kebab son buenísimos!.
Espero que esta pequeña reseña te haya despertado el espíritu viajero que tienes y te haga, algún día, ir a este maravilloso país, donde sin duda a través de tus videos, sentiré como si estuviera ahí otra vez!.