Desde hace tiempo quería compartirles un poco de literatura de viajes, de los temas que más disfruto en la vida y quien mejor qué Clara Oligado para esto.
Clara es una escritora que nació en Buenos Aires, exiliada política y vive en Madrid desde 1976.
En su libro ”Una casa lejos de casa”, (la escritura extranjera), nos comparte su experiencia como exiliada política, un libro lleno de analogías, de recuerdos, y de lo que es arraigar en el aire.
La extranjería, es uno de los temas que más nos toca a todos aquellos que hemos decidido salir de nuestros países para crear “Una casa lejos de casa”.
A lo largo del libro, Clara Obligado nos cuenta lo doloroso que es nombrar lo que está pasando, cuando llegas sola a un lugar en donde no conoces a nadie. “Sentirte encerrada afuera”.
Una “vida rota”, saber que el regreso está lejos, y estar completamente segura que al lugar donde llegas, no encontrarás un rostro familiar.
Clara cuenta lo que duele.
“Del verano al invierno, de la luz oblicua de Buenos Aires al azul plano de Madrid, de las avenidas enormes a las angostas callejuelas antiguas, del olor a carne asada al del aceite, de lo familiar a lo desconocido, de los afectos cercanos a la nada.
Ni casa, ni amigos, ni trabajo.
Solo la vida.”
En este libro se habla de una “herida al aire libre”. La hostilidad que se vive en un país extraño, la pérdida.
Te comparto esto porque hace un par de años, llegué a un país que no es el mio, vivo una vida en extranjería. Casi todos los lugares son nuevos para mi. El lenguaje, las personas, las calles, las casas.
Cada día lo vivo empezando desde cero.
Y siento que mi vida solo puede avanzar si se mezcla.
“No se nace extranjero, es una condición que se nos va pegando, como una segunda piel, como una costra, extranjero es siempre el otro, en sí mismo el sustantivo implica negación. Forastero, meteco, ajeno, extraño, etimologías excluyentes, ninguna de estas palabras suena bien. Ser definido por no pertenecer”
El movimiento infinito de nuestros pies en el mundo. ¿Tu vida también es así?
Clara, también habla de lo que pasa con la vida cuando se está en entre dos idiomas.
“Hablar al mismo tiempo dos idiomas, superponerlos y tejer códigos secretos. Sumar. Piscina, alberca, pileta. He desarrollado un mestizaje íntimo, una colisión de idiomas que tal vez comprenda solamente yo. Tener para siempre un idioma inestable”
Escribo esto recordando a Jorge Drexler, con su canción “movimiento” en donde dice que no tenemos pertenencias si no equipaje. Y entre Jorge Drexler y Clara Obligado, me encuentro.
Y puedo entender lo que pasa con mi vida. Una vida de puro movimiento, abrazar lo que nace cuando uno avanza hacia la exploración constante de la vida.
“Ha llegado el momento en el que no sabemos qué es ir, qué es volver. Entre tantas cosas perdidas, hemos perdido el habla común.”
Espero que este libro te pueda acompañar en esa vida extranjera, que encuentres la compañía de Clara Obligado tanto como yo la he encontrado estos últimos años.