¿Cuántas veces no escuchamos una canción, leemos un libro, vemos un video o probamos algún platillo que nos remite a un lugar especial o incluso hasta desconocido?
En esta época de pandemia hemos tenido que poner en pausa los viajes, sin embargo esto no significa que podamos seguir disfrutando de los regalos y experiencias que tiene el mundo para ofrecernos, pues a través de actividades que se pueden hacer desde casa podemos recorrer el planeta.
Hace unos días tuve la oportunidad de hacer un recorrido por Cartagena de Indias, a través de sus sabores, su gente, la música y las letras de Gabriel García Márquez.
Gracias a Foodies Colombia pude conocer y ser parte de la cultura de la ciudad de Cartagena al tomar una clase de cocina para aprender a hacer algunos platillos que marcaron a Gabo y que aparecen en sus obras literarias, en mi caso, en El Amor en los Tiempos del Cólera.
Pero esta clase no fue una clase de cocina cualquiera, fue más allá. La impartió la chef Meli Hernández e inició con un poco de historia de la ciudad para que pudiera entender la importancia de algunos ingredientes en la gastronomía colombiana y de la ciudad de Cartagena. Las berenjenas, el plátano y el coco serían protagonistas en esta experiencia.
Posteriormente escuchamos un fragmento de El Amor en los Tiempos del Cólera, el cual nos contaba acerca del día en que Fermina Daza comió berenjenas, sin saber lo que estaba probando, pues cabe destacar que ella las aborrecía, pero en ese momento quedó enamorada del platillo.
Este fragmento fue el preludio para comenzar a cocinar esas berenjenas.
Admito que estaba muy emocionada y nerviosa, pues las berenjenas tienen un sabor muy peculiar y yo nunca las había cocinado, además, había escuchado que si no sabes prepararlas puedes arruinar el platillo, así que estaba ansiosa por conocer ese secreto y al mismo tiempo temía hacerlo mal y que mi resultado fuera fatal.
Todo transcurrió exitosamente, la chef me fue guiando paso a paso para lograr un platillo delicioso.
Cabe destacar que mientras cocinábamos, escuchamos más fragmentos de El Amor en los Tiempos del Cólera, y para darle vida y color a la clase, escuchamos algunos vallenatos y canciones iberoamericanas que marcaron a Gabo.
La chef también me contó más datos sobre la cocina del Caribe colombiano y cómo influyó en la vida de Gabriel García Márquez.
Mientras terminaban de hacerse las berenjenas, aprendí a hacer los populares patacones, hechos de plátano y acompañantes de prácticamente todos los platillos. Además, en la elaboración de estos aprendí la técnica para lograr un patacón crujiente.
Finalmente, una comida no puede estar completa sin el postre, así que la última receta que preparamos fueron las deliciosas y dulces cocadas.
Una vez que quedaron listos todos los platillos llegó el momento de la degustación. ¡Wow! fue algo espectacular, estaba muy emocionada y orgullosa de mi misma, las berenjenas quedaron deliciosas y no se diga los patacones y las cocadas.
Esta clase fue una experiencia única, logré involucrarme con la cultura colombiana, en especial la de Cartagena, viajé hasta esta ciudad y sentí la calidez de su gente, disfruté sus olores, sabores y su gran ambiente. Cartagena, ruego a los dioses viajeros que pronto me den la oportunidad para conocerte cómo se debe.
La gastronomía es fundamental en nuestros viajes, y una de las ventajas que podemos sacarle actualmente es que a través de los sabores podemos ir hasta su lugar origen e involucrarnos con él.
Si son unos #GordosPorElMundo les recomiendo esta experiencia ¡es algo único! Y si son fans de Gabriel García Márquez, será aún más especial.
Les comparto el video de Alan por el Mundo en Cartagena y vivan junto con él su experiencia, que por cierto, también hizo un recorrido gastronómico basado en Gabriel García Márquez.