Con motivo de la elección del próximo Papa la Capilla Sixtina se mantendrá cerrada en las próximas semanas. Por lo cual los visitantes que vayan al Vaticano no podrán disfrutar de tan conocida obra realizada por Miguel Ángel y que ha llamado la atención por tantos siglos de devotos y no devotos. Sin embargo una “nueva” atracción estará abierta al público y es que después de 30 años de trabajo, se terminó la restauración de los frescos que hay en el segundo piso del Vaticano correspondientes a las habitaciones papales realizadas por Rafael.
El espacio consta de 4 habitaciones que fueron en un principio decoradas por distintos artistas del año 1492 – 1503 aproximadamente, sin embargo fue que en 1508 Rafael fue convocado por el Papa Julio II quien después de ver a varios candidatos decidió que Rafael era el indicado para realizar el trabajo y empezar desde cero.
La restauración trajo consigo muchos datos importantes como ver la forma en la cual trabajaba Rafael, como hacia para transportar de un pequeño papel a una pared entera todo un concepto, la forma tan rápida en la que trabajaba, nuevas técnicas para el uso de materiales y lo bien organizado que era. Asimismo se pudo entender ciertos aspectos de la vida cotidiana de aquel entonces debido a que se encontraron unos frijoles que posiblemente formaban parte de la dieta cotidiana de los europeos.
La restauración que comenzó en 1982 se hacía de un fresco a la vez con el fin de que los visitantes pudieran seguir disfrutando de las otras obras. El programa de restauración corre a cargo de los Patronos del Arte del Vaticano quienes han ayudado a mantener bien conservado, joven y atractivo el arte que se encuentra dentro de sus instalaciones.
El siguiente proyecto es la restauración del cuarto de Constantino el cual consta de frescos diseñados por Rafael que fueron realizados hasta después de su muerte por integrantes de su taller.
Pregunta Alan x el Mundo: ¿Han visitado el Vaticano? ¿Creen que las pinturas y esculturas tienen el cuidado debido?
Espero sus respuestas.
Saludos!
Hola.
Pues no; no he ido. Una de mis alumnas me trajo un libro de los museos vaticanos y he visto las obras en buen estado, creo en mi muy humilde opinión que están bien tratadas; imagino que ha de ser muy complicado mantenerlas por factores como la humedad, el polvo, la técnica del fresco que se haya empleado (hay más de uno) y los años.
Pero sí creo que están en condiciones positivas. Pero no hay como poder comprobarlo a los ojos propios.
Mmmm tendrás que ir y comprobarlo tú mismo.Ahí está, una investigación como esa es importante 😉