Hay hoteles que prometen descanso, y hay otros que lo convierten en una experiencia transformadora. Maroma, A Belmond Hotel, Riviera Maya, es de los segundos. A solo 30 minutos del Aeropuerto Internacional de Cancún, este refugio renovado con maestría logra capturar la esencia más pura de la Riviera Maya: selva, mar y cultura se entrelazan para ofrecer una escapada que alimenta cuerpo, mente y paladar.
Diseño inspirado en la cultura maya
Ubicado entre la exuberante jungla y el mar Caribe, Maroma se presenta como un santuario oculto donde la estética maya y el diseño contemporáneo coexisten en perfecta armonía. Sus 72 habitaciones y suites —el 75% con vista directa al mar— han sido decoradas con arte local bajo la visión de la reconocida diseñadora Tara Bernerd.
Cada rincón parece pensado para descansar sin distracciones, acompañado por los sonidos de la naturaleza y una suave brisa marina.
Cocina de fuego y sabores de México
Pero si hay algo que eleva esta experiencia al siguiente nivel es su oferta gastronómica. Cuatro restaurantes y bares frente a la playa se encargan de hacer de cada comida un acontecimiento. La cocina celebra lo mejor de México y el mundo, con énfasis en ingredientes frescos y técnicas que resaltan el sabor sin artificios.
Desde cocina de fuego internacional hasta mezcales artesanales y vinos mexicanos poco comunes, la propuesta culinaria convierte cada platillo en una muestra de identidad.
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Bienestar con sello Guerlain
Para quienes buscan reconectar profundamente consigo mismos, el spa Guerlain —el primero de la firma en América Latina— ofrece rituales de bienestar únicos. Con siete cabinas individuales y dos para parejas, este espacio invita a explorar antiguas prácticas de sanación a través de tratamientos que incorporan elementos naturales y herbolaria.
Además, se puede disfrutar de la botica del spa y participar en un programa de biodiversidad que vincula el descanso con la conciencia ambiental.
Maroma también es un sitio ideal para celebraciones íntimas o viajes en grupo. Cuenta con ocho espacios al aire libre para eventos privados, tres albercas exteriores, marina, gimnasio, boutique y actividades como nado en cenotes o recorridos para conocer el legado maya de la región.
Lujo con autenticidad en el corazón del Caribe
En un destino donde abundan los hoteles de lujo, Maroma logra destacarse por su autenticidad, su conexión con la tierra y una propuesta culinaria de primer nivel. Aquí, el lujo no está en el exceso, sino en la calma, el silencio y en cada bocado que sabe a México profundo.
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