Cuando pensamos en Egipto, la majestuosidad de las Pirámides de Giza y el esplendor de Luxor suelen venir a la mente de inmediato. Sin embargo, este fascinante país tiene mucho más que ofrecer en términos de historia antigua y maravillas arqueológicas.
Vamos a alejarnos de las rutas turísticas convencionales y sumergirnos en el Egipto menos explorado, descubriendo cinco pirámides y ruinas poco conocidas que deslumbrarán a los viajeros intrépidos.
Pirámide de Meidum: El Misterio Inclinado
La Pirámide de Meidum, también conocida como la “Rota” o “Falsa pirámide”, es única por su forma cónica y escalonada. Aunque su origen exacto es incierto, se cree que fue construida durante la Dinastía III.
Originalmente, la pirámide tenía siete gradas, que luego fueron ampliadas a ocho. Finalmente, Seneferu la transformó en una pirámide de caras lisas. Actualmente, solo son visibles tres niveles.
En la antigüedad, la pirámide se derrumbó, y solo la parte central de su núcleo interno permanece en pie, lo que le otorga un aspecto de torre, único entre las pirámides egipcias.
Ubicación: Al sur de El Cairo, esta pirámide se encuentra cerca del oasis de Fayún.
Consejo de Viaje: Explora los alrededores del oasis antes de visitar Meidum para obtener una perspectiva única.
Pirámide de Dahshur: La Pirámide Roja
Narrativa Histórica: Construida por el faraón Sneferu, la Pirámide de Dahshur destaca por su color rojizo y su diseño más inclinado. Este antiguo ingenio marcó el paso hacia las pirámides lisas y perfectas de Giza.
Se cree que su forma peculiar representa un intento fallido de crear una pirámide de caras lisas, que marca la última etapa en la evolución de las pirámides egipcias. Presenta numerosas características distintivas y comparte similitudes con la pirámide construida por el hijo y sucesor de Seneferu, Jufu, más conocido como Keops.
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El complejo funerario incluye la pirámide del faraón y una pirámide satélite de 26 metros de altura ubicada al sur, ambas rodeadas por un muro de piedra de 2 metros de altura.
Ubicación: Al sur de Giza, cerca de Saqqara.
Consejo de Viaje: Explora la Pirámide de Dahshur temprano en la mañana para evitar las multitudes.
Ruinas de Tanis: Ciudad de los tesoros olvidados
Tanis, la joya del delta del Nilo, fue una ciudad próspera durante el Tercer Período Intermedio. Descubre tesoros escondidos entre las ruinas que rivalizan con las maravillas de otros lugares más famosos.
Fue la sede principal de Egipto durante las dinastías XXI y XXIII, cuyos monarcas provenían de Dyanet (Tanis). A pesar de perder su estatus como capital, la ciudad mantuvo su importancia como centro comercial y estratégico hasta el siglo VI, cuando al enfrentar la amenaza de inundación por el lago Manzala, fue finalmente abandonada.
Asimismo, sirvió como lugar de sepultura para los reyes de las dinastías XXI y XXII, reemplazando al Valle de los Reyes en esta función.
Ubicación: En el delta del Nilo, al noreste de El Cairo.
Consejo de Viaje: Recorre los túneles de las ruinas para una experiencia auténtica. Imperdibles la Gran Esfinge de Tanis, el Templo de Amón-Ra, la Avenida de las Esfinges, el Palacio Real y el Museo de Tanis.
El Templo de Kom Ombo: Un Testimonio de Dualidad
Ubicado a orillas del río Nilo, el Templo de Kom Ombo es un monumento único que se distingue por su estructura dual. Construido durante la dinastía ptolemaica, este templo está dedicado a dos dioses: Sobek, el dios cocodrilo, y Haroeris, el halcón. La dualidad de este templo lo convierte en un destino fascinante para aquellos interesados en la mitología egipcia.
Consejo de Viaje: Explora el templo durante la tarde para evitar las multitudes y disfrutar del impresionante atardecer sobre el río Nilo.
Pirámide Negra de Amenemhat III: Perla Desconocida
En el vasto tapiz del tiempo en Egipto, encontramos la enigmática Pirámide Negra, un testamento a la grandeza de Amenemhat III durante el floreciente Imperio Medio (circa 2040 – 1795 a.C.). Enclavada entre las once majestuosas pirámides de Dahshur, su presencia se alza como un monumento a la ingeniería y a las decisiones poco convencionales.
Llamada así no por las tendencias góticas, sino por el matiz oscuro que ha tomado con el paso de los siglos, esta estructura alberga secretos que despiertan la curiosidad de los viajeros.
Amenemhat III, el faraón visionario tras esta creación, ideó una tumba única en su género al diseñarla para albergar tanto a él como a sus princesas. Un toque distintivo en el mundo de las pirámides, esta maravilla presentaba dos corredores separados, anticipándose a las convenciones funerarias de la época.
Consejo de Viaje: Contempla la Pirámide Negra al atardecer para ver cómo los últimos rayos de sol pintan la estructura de un tono aún más oscuro.
Este itinerario te sumergirá en la riqueza histórica de Egipto más allá de las famosas pirámides. ¡Prepárate para una aventura única y descubre la magia de lo desconocido!