Hey bandita viajera, la navidad quedó atrás pero el invierno y la nieve permanecen en muchos países del mundo, así que aún están a tiempo de hacer este hermoso road trip invernal que me aventé por la provincia de Quebec a principios de marzo.
Día 1. La Ciudad de Quebec: Bonjour Hotel de Hielo.
Viajé de Ciudad de México a Quebec City con escala en Montreal. En el aeropuerto renté un auto -que ya traía sus llantas especiales para la nieve, también recogí mi ropa de invierno para los próximos días con Tuque & Bicycle Expériences @quebecfatbike y me fui directamente al Hôtel-Musée Premières Nations @hotelpremieresnations, un hotel museo inspirado en las tradiciones de las First Nations locales. Di un recorrido para conocerlo y después bajé a su restaurante La Traite @restaurant_la_traite con una cocina inspirada en las preparaciones y el “terroir” nativos ¡Gran cena!
A 15 minutos de ahí está el Hotel de Glace @hoteldeglace (el hotel de hielo). Primero te asignan una habitación en el Hotel Valcartier, se pueden ir a tomar un baño caliente al jacuzzi a media noche y luego deben alistarse para ahora sí pasar la noche en una habitación hecha completamente de hielo ¡wow! Dormí de maravilla envuelto en el “sleeping bag” que te dan, y no sentí frío en ningún momento. A la mañana siguiente hice el tour del Hotel de Glace, incluido su bar; cualquiera puede hacerlo aunque no se quede a dormir (cuesta 30 dólares). Cada año el hotel se destruye en primavera y se re construye en invierno; y cada año el diseño del hotel es completamente diferente.
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Día 2. La Ciudad de Quebec: El Río, El Castillo y el Funicular.
Más tarde me dirigí al centro de Quebec City para hacer check en el hermoso Hotel 71 @hotel71. Una vez instalado salí a caminar, visité la maravillosa Place Royal, y aproveché para almorzar algo rápido en Smith Cafe @smithcafeco. Después caminé hasta el muelle para admirar el hielo flotante del Río San Lorenzo, y tomé el emblemático funicular hasta la zona del Castillo Frontenac. Mi plan era lanzarme en trineo de su tobogán de Dufferin Terrace, pero lo cerraron porque estaba haciendo “mucho calor” jajaja.
Sin más, pasé a un costado del Viejo Quebec y de la Rue Petit Champlain, y caminé hasta la pista de patinaje en Place d’Youville enmarcada por la muralla y algunos hermosos edificios. Finalmente por la noche, fui a cenar cerca del hotel al fantástico Chez Muffy @chez_muffy . Fue una cena magnífica de tres tiempos ¡De lo mejor que he probado en Canadá!
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Día 3. Charlevoix: La Cabaña, la Cidra y la Hidromiel.
Amaneció algo lluvioso en la Ciudad de Quebec. Bajé a desayunar al restaurante del hotel Hotel 71 e hice check-out para irme a una mañana de spa y relajación a @stromspa y después almorcé ahí mismo.
Me despedí de Quebec City y manejé cerca de una 1 hora y media hasta la región de Charlevoix, y fui a hacer check-in al increíble lugar donde pasaría esa noche: Tanières MicroChalets Charlevoix @tanieres_microchalets. Son cabañas ecoturísticas, estilo escandinavo, en medio del bosque nevado.
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Una vez que dejé mis cosas me fui al poblado de Baie-Saint-Paul y estacioné el auto junto la Iglesia. Caminé por su calle principal, Rue St Jean Baptiste, llena de negocios, restaurantes y galerías de arte, y me metí a probar la cidra local en Cidrerie et Vergers Pedneault @vergerspedneault. Más tarde di con “Hydromel Charlevoix” donde producen vinos y destilados a partir de sus granjas de miel ¡Buenísimo! y finalmente fui a cenar a Le Mouton Noir @moutonnoirresto, es muy acogedor y la comida muy rica.
Día 4. Charlevoix: La Malbaie.
La siguiente mañana desperté en los bosque de Charlevoix -me resbalé dos veces en el hielo jajaja- y luego me tomé un café antes de partir. Pasé por un box lunch para desayunar a Al Dente Charlevoix @aldentecharlevoix en Baie-Saint-Paul y retomé la carretera por una hora aproximadamente hasta el Parque Nacional Hautes-Gorges-de-la-Rivière-Malbaie ¡El lugar es hermoso!
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Estuve un ratito refugiado en el Centro de Visitantes (Draveur Service Center) y en tarde hicimos un tour guiado. Nos pusimos los picos en las botas y caminamos unos 6 kilómetros en total a un costado del río congelado; el viento enfureció y congelaba cualquier parte del cuerpo al descubierto, pero la belleza era insuperable. Luego llegamos al tobogán de hielo y nos lanzamos un par de veces sobre sus donas inflables (tubing) ¡Súper divertido! De vuelta al Centro de Visitantes aprendimos sobre la fauna local.
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A las 4 pm cerraron así que manejé 40 minutos hasta mi siguiente destino: Auberge La Marmite @aubergelamarmite en La Malbaie. Es una casona antigua, clásico bed and breakfast rústico, con una vista maravillosa del Río San Lorenzo. Finalmente en la noche bajé a cenar y ¡wow su menú de 4 tiempos ¡Lo amé con locura! Ah y un vino rosado de por acá acidito y refrescante ¡Salud!
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Día 5. Saguenay-Lac-Saint-Jean: El Fiordo.
Divino amanecer en La Malbaie desde el Auberge La Marmite , y luego bajé a desayunar y un tremendo pan francés.
Más tarde manejé alrededor de una hora y media hasta la región de Saguenay-Lac-Saint-Jean, específicamente La Baie (La Bahía). Visité el Musée du Fjord @museedufjord, que explica de manera muy didáctica e interesante la formación del Fiordo y los primeros habitantes en la región.
Saliendo del museo pude ver algunas cabañas de pescadores que se asientan aquí durante el invierno a pescar, y después manejé 5 minutos hasta Auberge des Battures @laubergedesbattures un albergue sobre una colina. Me instalé en mi habitación, y después de un bonito atardecer sobre la bahía bajé a cenar a su restaurante.
Día 6. Saguenay-Lac-Saint-Jean: Las Moras, el Bosque y la Cena Misteriosa.
A la mañana siguiente bajé a desayunar y luego manejé una hora hasta un lugar muy especial. Domaine Le Cageot @domainelecageot es el único viñedo de todo Saguenay y aquí realizan productos con sus uvas, moras y otras frutillas: fermentados, destilados y alimentos.
Ya después nos fuimos a Centre Plein Air Bec-Scie @contact_nature un centro de actividades en la naturaleza todo el año. Comimos hamburguesas con poutine y luego hicimos caminata sobre la nieve con raquetas (snowshoeing) rodeados de un bonito paisaje invernal.
De ahí nos movimos al extraordinario Auberge des 21 @aubergedes21 un albergue histórico de la ciudad situado justo enfrente del fiordo, y en la noche bajé a cenar a su maravillosa restaurante. Probamos el menú de 9 tiempos, que diferente cada día preparado con ingredientes locales, y donde tú tienes que adivinar qué fue lo que comiste antes de ser revelado. La calidad de la comida y los vinos ¡insuperable!
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Día 7. La Ciudad de Quebec: À bientôt! (hasta pronto en francés)
Último día en Canadá, amaneció nublado en La Bahía. Bajé a desayunar y luego di un recorrido por el Albergue.Cada esquina tiene una hermosa historia como sus bancos de iglesia restaurados ¡Me enamoré!
Finalmente llegó la hora de partir de Quebec. Manejé casi tres horas de Saguenay hasta Quebec City y llegué al aeropuerto después de haber regresado la ropa y el auto rentados. Así llegó a su final este viaje, volando a México vía Toronto.
Espero que les haya gustado bandita, y que puedan hacer este viaje pronto. Para más información visiten la página oficial de Turismo de Quebec “Bonjour Quebec”: https://www.bonjourquebec.com/es-mx
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